Si me lo permiten...

La situación de Venezuela está tan mal como nunca antes se ha visto. Y no me refiero desde el punto de vista económico sino desde el punto de vista moral y nacionalista. Cuando en 1989 estalló el Caracazo, la chispa fue el aumento de la gasolina. Este a su vez provocó un aumento del pasaje del transporte público. Pero el epicentro no fue en Caracas. Fue en Guarenas y Guatire, ciudades donde vivía el grueso de la clase trabajadora que diariamente viajaba a Caracas donde se ubicaba sus puestos de trabajos. El descontento por este aumento generó una serie de protestas locales que paralizaron, por un lado, al transporte principal de esa clase trabajadora: es decir, no hubo transporte desde esas ciudades hasta Caracas; y por otro lado se paralizó un sector importante del comercio e industria de la ciudad capital al no presentarse esa clase trabajadora.

Actualización al 31/10/2013 Nuevamente mi cuenta de Twitter.com @cesmarram ha sido suspendida mediante solicitud por personas que creen que están haciendo una labor patriótica cuando en realidad le hace un favor a este régimen. Desde las 9:00pm del día anterior hasta estos momentos (5:00am) estuve sin posibilidad de ejercer mi derecho a la libre expresión por culpa de aquellos que supuestamente luchan contra la tiranía y la opresión, mientras hacen lo que condenan del régimen al denunciarme, sin razón alguna y sin fundamento, por decir la verdad. Esta situación me llena de orgullo. En la añorada 4ta Répública era bien visto y aplaudido el periodismo del bueno. ¿Se acuerdan? PONER EL DEDO EN LA LLAGA! Ese periodismo, sin ser yo periodista y sin ánimo de serlo pero con la convicción que no puedo quedarme callado, es lo que he hecho indirectamente al denunciar las acciones que se reflejan en este artículo de a continuación. César Martínez ------------------------------------------

La suspensión de mi cuenta en Twitter @cesmarram es resultado de que tuiteros famosos se sientan aludido por mi crítica acérrima a sus llamados al voto bajo estas condiciones inaceptables impuestas por el CNE y aceptadas por esta oposición conchupante. No es más que su desesperación porque hay personas que no se dejan engañar por sus palabras dulces que en el fondo pretenden perpetuar este régimen castro-comunista-renovado.

El Acta de la Traición I fue una tremenda bomba en las filas de la Oposición genuflexa a este régimen. Tanto que prácticamente no hay entrevista que dan sus miembros con la única condición de que no se hable del tema. Ayer 13 de octubre, Robert Alonso publicó el Acta de la Traición II que es un acta firmada en las oficinas del CNE en la UBV donde detallan la auditoría al Sistema de Identificación al Elector (SIE), que son las laptops que todos vimos afuera donde cada votante debía identificarse para saber en qué mesa votar. El asunto es que el evento en sí no despierta sospecha alguna. La sospecha nace cuando se mira al final del documento donde los firmantes solicitan al CNE una información " detallada ".

La nacionalidad de Nicolás Maduro se ha vuelto un tema muy importante porque toca una parte muy sensible de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV),  y es la del requisito para optar al cargo de Presidente de la República. Hay varios artículos de nuestra Constitución que especifica la nacionalidad que debe tener el aspirante al cargo de Funcionario Público (FP). La Constitución a la que se hace referencia es la aprobada en 1999 por Referendo Popular con su enmienda del 2009 y puede ser consultada en siguiente enlace: Constitución de la República Bolivariana de Venezuela Hay varios requisitos sobre la nacionalidad para optar el cargo de Fiscal General, Diputados a la Asamblea Nacional, Gobernadores, Procuradores, etc. Pero el que nos atañe es el de Presidente de la República. Sin embargo, primero vamos a ver lo que significa "nacionalidad" y qué dice nuestras leyes al respecto.